Estimadas familias:
En nuestras sesiones de motricidad, Alberto nos preparó unos circuitos de psicomotricidad, adaptados a niños de 0-1 año. Fue una mañana llena de movimiento, sonrisas y diversión.
Entre las colchonetas, rampas suaves y un túnel, los más pequeños tuvieron la oportunidad de explorar su cuerpo y su entorno de una forma segura. Pero lo que más les llamo la atención fueron los churros de goma espuma. Ligeros, blanditos y llenos de posibilidades, se convirtieron en un recurso estrella.
¿Por qué es tan importante la motricidad a esta edad?
La motricidad es esencial en los niños de 0-1 año, ya que tiene diversos beneficios:
- Mejora la coordinación y la orientación en el espacio.
- Impulsa la autonomía.
- Fortalece el cuerpo y favorece el control corporal.
Nuestras sesiones de motricidad son muy enriquecedoras, ya que el movimiento es la puerta de entrada al aprendizaje.

Además, hemos realizado un taller artístico. Extendimos papel continuo en el suelo y dibujamos en el una nube. A partir de ahí, los pequeños simularon la lluvia pintando con los pies.

La mezcla de pintura y los desplazamientos convirtió el papel en un paisaje lleno de huellas. Es una actividad que no solo fomenta la creatividad , sino la motricidad, percepción sensorial y libertad de expresión.
Casi todos los días nuestros pequeños visitan a las gallinas. Les encanta observarlas, escucharlas y acercarse con cuidado, descubriendo poco a poco el mundo que les rodea. Estos momentos fomentan su curiosidad, sus sentidos y el cariño por los animales, mientras disfrutan de sonrisas y gestos llenos de sorpresa.
La música se convirtió en un puente para acompañar las emociones y los ritmos de los azulitos. Hemos transformado nuestra clase en un pequeño espacio de exploración sonora, para que cada uno pudiera descubrir la música desde su curiosidad.
Más que presentar instrumentos, ofrecimos oportunidades: colocamos xilófonos, maracas, panderetas, triángulos,… Dejando que ellos mismos, decidieran cómo y cuando acercarse. Fue muy interesante ver cómo, a esta edad tan temprana, van mostrando pequeños gustos y formas de enfrentarse a lo nuevo. La música nos permitió conocerlos un poquito más: quién se lanza rápido, quién experimenta con calma o quién busca compartir la experiencia con algún amigo. Este tipo de momentos nos ayuda a comprender mejor a cada uno de los pequeños.
Un abrazo,
Laura.