Amarillos ya es miércoles, estamos justo en la mitad de la semana, y tenemos la suerte de vernos en nuestra sesión de zoom, ¿todos preparados?
Después de la sesión si os parece podemos continuar nuestro día del «cole en casa» con una sesión de Método de propuestas en la que jugaremos a…, vamos a pensar un poco. Pensamos, pensamos y decidimos que vamos a jugar a la cocinita, los animales y los disfraces. ¿A que os apetece?, seguro que tenéis estos juguetes en casa ¿verdad? Escoged la propuesta que más os guste y solamente tenéis que dejar volar vuestra imaginación.
Familias, como os hemos explicado en múltiples ocasiones, el juego
permite al niño/a desarrollar su imaginación, explorar el medio que le rodea, expresar su visión de ese mundo, desarrollar su creatividad y desarrollar habilidades socioemocionales entre iguales y adultos. Niños y niñas se desarrollan de manera global a través del juego, de manera que en ninguno de los casos debemos subestimar su función. Os dejamos las palabras de una especialista en la materia que vienen a avalar lo que desde el cole se os orienta:
Solos o acompañados, el juego es fundamental y para ello deben tener su tiempo y su espacio. Y tras el juego en el que todos hemos participado, todos tenemos que colaborar en recoger juguetes y materiales.
De la misma forma que en el cole, «a guardar, a guardar, cada cosa en su lugar». También en casa es muy importante tener nuestros juguetes ordenados, sabemos dónde se guardan y debemos colaborar, ¡ánimo chic@s!
El juego es vehículo de las relaciones, y durante el mismo se dan diversas desavenencias que con la práctica y la experiencia vamos aprendiendo a manejar y resolver, pero qué difícil resulta a veces ¿verdad? Sobre todo cuando solamente tienes 2 o 3 años…jajajaja
Amarillitos, os dejamos la historia de dos personajes que no se ponen de acuerdo para cruzar un puente muy alto, ¿cómo pensáis que lo harán? ¿se pondrán de acuerdo al final? Os animamos a que vosotros mismos lo descubriréis.
Tras el juego, vamos a hacer un dibujo de nuestra experiencia, la expresión gráfica de lo vivido. Igual que hacemos en el cole, ofreced a vuestros hijos/as papel blanco en el que poder expresarse libremente y animadlos a realizar un dibujo sobre su juego de la mañana. El feedback que les ofrezcáis sobre su resultado va a ser crucial, y va a influir directamente en su nivel de motivación a la hora de realizar otros próximos dibujos.
Ánimo amarillos, esperamos que nos enviéis unos dibujos preciosos para que los podamos disfrutar desde casa. Si nos enviáis alguno podríamos subirlo al blog y así lo veis los demás compañeros…
Y para terminar el día, aquí os dejamos una preciosa poesía de primavera que os podrán leer papá y mamá, esperamos que os guste.

Mañana más… ¡besos para todos y todas!
Familias, con un poquito de cinta de colores (incluso podéis usar tiras de papel higiénico…) podéis «trazar» en el suelo de vuestro salón/pasillo diferentes recorridos para que vuestro hijo/a siga. Se trata de un ejercicio de equilibrio en el que podéis probar su control corporal y su nivel de habilidad. Realizad zig-zag, hondas serpenteantes, rectas… ¡Vosotros también podéis probar!
Cuando esté seca la pintura, pega encima por la parte de arriba la cara, con sus ojos, orejas, y después pinta sus patitas, solo dos si esta de frente o cuatro si esta de perfil (esto es un poquito difícil, pedid un poco de ayuda a papá o mamá). Por último colócale un lacito o cordón.
guste: juegos en la bañera, jugad con vuestros juguetes, ayudad a papá y mamá con la comida…, lo importante es que os relajéis y decidáis por vosotros mismos lo que preferís hacer.
Niños y niñas, papás y mamás, os deseamos a tod@s un feliz inicio de semana.
la semana que dedicamos a descansar, relajarnos y hacer nuestras actividades favoritas.
Por un lado, os queremos proponer una rica receta de cocina en la que vamos a usar como ingrediente «leche de vaca». Se trata de nuestras tradicionales galletas de coco, pero con alguna que otra variante…, ¡ánimo cocinillas! como bien sabéis a vuestros hijos e hijas les encanta meter las manos en la masa.
