La semana pasada fue un tanto peculiar por varios motivos evidentes, su escasa longitud lectiva y el «apagón» que sufrimos el lunes. Aún así aprovechamos al máximo todo el tiempo disponible para realizar algunas actividades, talleres y experiencias significativas.
Tuvo lugar el taller mensual de «habilidades sociales» con nuestra compañera Laura H. quien nos siguió planteando juegos y situaciones de reflexión, enfocados a potenciar nuestra flexibilización cognitiva. La participación activa del alumnado en este tipo de dinámicas, permite que el aprendizaje sea mucho más significativo. Aplicar ciertas estrategias a «situaciones problema» que ellos/as mismos/as viven en su día a día, proporciona un mayor número de herramientas para poder aplicar cuando éstas se nos presenten.


Recordar todo lo vivido en la Semana de la lectura, reflexionar sobre ello y elegir lo que más nos gustó, fue otra de las experiencias llevadas a cabo. Como era de esperar el teatro que otorgó clausura a esa fantástica semana «El libro de la selva» fue el más elegido entre el alumnado ¿Acaso tendrá algo que ver que fueseis vosotros los que lo llevasteis a cabo? ja, ja, ja. Sin duda será algo que permanecerá en su recuerdo para siempre.
La celebración del cumpleaños de nuestra «profe en prácticas», Elena, tuvo también cierta repercusión en nuestro día a día, porque al igual que hace el alumnado nos invitó a bizcocho, y eso siempre es motivo de celebración.
Aprovechamos para agradecer la labor que realiza cada día en nuestro centro, participando como una más del equipo docente que lo compone.
Un taller artístico y creativo, cuya temática era «las flores de la primavera», nos mantuvo ocupados buena parte de la jornada del martes.
Elegir cada una de las circunferencias que necesitábamos para componer nuestra flor, recortarlas, montarlas, pegarlas… es algo que ya realizan de manera totalmente autónoma. Con intención de avanzar en el desarrollo de nuestra memoria de trabajo, ofrezco las indicaciones a seguir al principio de la actividad y confiero total libertad creativa para llevarlas a cabo, tiñendo de personalidad cada una de sus creaciones artísticas.




En esta actividad confluyen objetivos de diversa índole, unos relacionados con contenidos o competencias más puramente curriculares y otros asociados al desarrollo de habilidades motrices e incluso a habilidades sociales.
Aprovechamos distintos momentos de la jornada, para ir dando lectura a los libros que compramos con la recaudación del vivero.
De momento hemos escogido éstos, pero de aquí a final de curso iremos leyendo todos y cada uno de ellos.
Hemos comenzado a grabar nuestro «audiocuento», que como sabéis quedará enlazado en el QR que hay en la contraportada del libro. Cuando esté listo os avisaré.
Deciros que finalmente la tirada de ejemplares ha llegado a 100, algo que no imaginábamos cuando comenzamos este proyecto. Mira que si a alguna editorial le da por publicárnoslo, ja, ja, ja.
¡Tengo unos chicos/as líderes en ventas!
Hemos dado comienzo a nuestro proyecto «La granja», realizando la primera lluvia de ideas previas, algunas sesiones de juego y construcción, y la lista de tareas a acometer antes de irnos de salida el próximo día 22. Todo el material que tengáis en casa, relacionado con ella, será bienvenido. Sobre todo necesitamos fotos impresas de imágenes reales, ya os iré desvelando el porqué.
Aún me quedan muchas cosas que contaros, como por ejemplo la salida de ayer a la vega, que enlazaré en la siguiente entrada ¡se está cociendo en el horno!
Hasta pronto,
Esther Justicia.