Empezamos el día con mucha actividad. Alberto nos deja dos paracaídas de colores uno muy grande y otro más pequeño. Los abrimos y cogemos cada uno de una punta, lo movemos arriba y abajo, después echamos pelotas encima y las hacemos saltar en la tela ¡¡ QUÉ DIVERTIDO!! Hacemos con él una gran cabaña donde se meten para esconderse, jugamos a «¿Dónde se han ido los niños?» y ellos gritan ¡aquíiiiiiiiii!. Les encanta porque al ser una tela que no pesa, ellos/as la pueden manejar sin problemas y además el efecto óptico de los colores es muy bonito y llamativo para ellos.
Surge como propuesta de juego los carritos de bebé y los bebés, así que han estado un buen rato paseando por toda la clase y compartiendo muy bien, esperando el turno….
Los jueves, les dejamos la clase a los naranjitas para su sesión de picomotricidad cuando nosotros nos vamos al patio y al no poder salir por la lluvia, nos proponen un cambio de clase. Llegamos a la clase naranja y pimero todos muy observadores, conociendo el espacio, los juguetes…. Y en un minuto ya estaban sacando la cocinita, los muñecos… Lo pasan muy bien y esta experiencia les sirven para conocer otros espacios de la escuela.
En la Asamblea reparte como super GUILLERMO que reparte la fruta con gran soltura.
Mañana os pondré fotos de estos momentos.
Carmen Jiménez
