Esta mañana hemos seguido con el taller que comenzamos la semana pasada, donde plasmaron la huella de su mano mojada en tempera; le hemos colocado el pico con una pegatina, un puntito para el ojos y una líneas para las patitas.
Así ha quedado la paloma de la paz.
Después hemos hablado sobre lo que necesitan los Papiros para crecer, agua, tierra y sol. Charito lo va dibujando y me comprometo a ponerle mañana un gran papel continuo para que ellos y ellas también lo dibujen.
Tomamos la fruta y en lugar de irnos al parque hoy nos hemos ido a la clase de usos múltiples. Lindley ha jugado con ellos y ellas disfrutando con los grandes bloques de goma espuma.
Mario ha traído su cuento preferido, «Cocorico», a todos les ha encantado. Durante la narración se han producido unos momentos de silencio, con una mezcla de miedo y risa, que les ha dado muchas ganas de repetir y representar la historia.
Gracias Mario, os animo a compartir esas historias que más les gusta.
Mañana seguimos.
Un Saludo.
Matilde
