Después de un tiempo lleno de creatividad y esfuerzo, ¡por fin hemos dado cierre a nuestro TALLER DE JUGUETES! Este proyecto, que forma parte del grupo rojo cada año, nos ha permitido explorar el reciclaje de una manera divertida y significativa.
Aunque la idea inicial era terminarlo antes, el proceso de fabricación ha tardado un poco más de lo previsto. Cada peque tenía en mente su juguete y los materiales a utilizar, pero entre tantas actividades diarias, hubo que encontrar momentos aquí y allá para ir avanzando.
Sin embargo, la espera ha valido la pena. Ver el resultado final y la ilusión en cada uno ha sido la mejor recompensa. ¡Gracias por la paciencia!
Durante semanas, exploramos cómo darles un nuevo propósito a esos objetos que trajimos de casa. ¿Una caja de cartón? Ahora es un castillo. ¿Un tubo de papel? Se convierte en un pájaro.
Más allá de la diversión, esta actividad nos ha enseñado algo valioso: reutilizar con ingenio y creatividad.
Porque no es cuestión de repetir lo aprendido, sino de descubrir cómo usar lo que tenemos para inventar algo nuevo. Y para eso, el juego es la mejor herramienta. En el ensayo y el error, en cada torre que se cae y en cada muñeco vestido del revés, hay un aprendizaje.
No se trataba solo de fabricar juguetes, sino de desarrollar habilidades, imaginar posibilidades y atrevernos a probar sin miedo al error. Fomentar la creatividad es un regalo para el futuro de nuestros niños y niñas.
Hemos comprobado que los juguetes más rígidos, con un solo propósito, limitan la imaginación. En cambio, los materiales reciclados y sin una forma fija son un lienzo en blanco para la creatividad. No imponen reglas, sino que invitan a explorar, transformar y crear sin límites.
Después de todo este viaje, podemos decir con orgullo que nuestros pequeños inventores han logrado algo increíble. Con sus manos y sus ideas, han construido juguetes únicos. Y como broche final, hemos abierto nuestra exposición para compartir sus creaciones con todo el colegio. La emoción en sus caras lo decía todo: ver su trabajo reconocido les hizo sentir aún más orgullosos.
Y así, entre risas, experimentación y mucho ingenio, cerramos este capítulo. Pero la creatividad… esa sigue en marcha, lista para el próximo desafío.
Quiero compartir con vosotros un video de Ken Robinson, «¿Las escuelas matan la creatividad?», es una de las charlas TED más vistas de la historia. En él, Robinson argumenta que los sistemas educativos tradicionales están diseñados principalmente para satisfacer las necesidades de la revolución industrial y no para fomentar la creatividad en los niños. Destaca cómo las materias artísticas suelen considerarse menos importantes que las matemáticas o la ciencia, y cómo el miedo al error impide la innovación y la capacidad creativa de los niños y niñas.
Silvia.
Finalmente, llegó el momento de nuestra visita al museo. Allí nos esperaba

Ayer celebramos nuestra
El pequeño trayecto que hicimos andando fue precioso, no solo por lo bucólico de estar paseando por la ciudad juntos, sino por los comentarios que nos hicieron los viandantes con los que nos cruzamos. A los que dejamos «encantados» con nuestro excelente comportamiento ¡qué orgullosa me puse!
Una vez allí nos recibió Pablo, encargado de las visitas didácticas a los centros y con el que tenemos ya relación desde hace más de una década.















Turno esta semana para 
Dado que las cartulinas contienen todo el texto que fue exponiendo, no es necesario que vuelva a transcribirlo.
A la misma vez que iba exponiendo, iba señalando las imágenes incluidas en las cartulinas, para que les sirviesen de referencia o los juguetes que trajo, a modo de ejemplificación.


















Tanto les gustó el haber conseguido crear su propia pirámide que realizamos una segunda parte del taller, en el que la premisa era realizar una creación libre que se mantuviese en equilibrio ¡conseguido!












