El protagonista, un caballero deslumbrado por el brillo de su propia armadura, a pesar de ser bueno, generoso y amoroso, (peleaba con sus enemigos que eran malos, no con los que eran buenos) no consigue comprender y valorar con profundidad lo que tiene, descuidando sin querer las cosas y las personas que lo rodean. Su armadura se va oxidando hasta que deja de brillar y, cuando se da cuenta, ya no puede quitársela. Prisionero de sí mismo, emprende entonces un viaje al final del cual, gracias a diversos personajes, logra deshacerse de la armadura que le había imposibilitado abrirse al mundo.
Para celebrar el día de la paz y no violencia, la comisión de convivencia propone una actividad para todo el Centro. Mediante un juego con la baraja de cartas, se forman parejas cuyos integrantes oscilan entre los 3 años y los 12. A cada niño se le entrega una carta que debe emparejar con otra en número y palo.
En cada clase, el niño mayor debe ayudar al pequeño a buscar un antónimo de paz para escribirlo en una pegatina y pegarlo en un vaso. A continuación, deben pensar dos sinónimos de paz y escribirlos en una pequeña bandera que irá pegada a una pajita.
Una vez realizada la tarea, el grupo sale al patio para plantar distintas semillas introduciendo dentro el mensaje de la pajita. Trabajo cooperativo para enterrar lo malo y plantar la felicidad.
El reto de la creación de un diario o periódico escolar en el tercer ciclo está en la creación del periódico en una jornada escolar.
A primera hora de la mañana, los grupos que forman el equipo redactor, se reúnen para decidir las noticias que pueden ser de interés para los compañeros; noticias del colegio, entrevistas, acertijos, curiosidades, pasatiempos, noticias de actualidad (consultando el periódico del día) o noticias que sepan del mundo para narrar, para repartirse el trabajo, investigar y consultar en el colegio.
Después de ello, se ponen manos a la obra y empiezan a redactar el periódico. Cada paso que vayan dando, deben consultarlo con los tutores del ciclo para aprobarlo, ellos llevan el papel de director del periódico.
Los periodistas deben maquetar toda la información, revisar la ortografía y publicarlo en papel y en el blog.
El reto va superándose publicando día a día un periódico y trabajando como una auténtica redacción.
El resultado lo mostramos en los siguientes enlaces: