El día después

Todas las horas que se echen de sueño pocas son, despiértate a las 11, siesta de 3 horas, a la cama a las 12, y aún así con sueño.

Casa patas arriba, deshacer la maleta, poner lavadoras, dormir, tender, dormir, planchar (y todo esto con los pies hinchados = trombocid, y alguna que otra ampolla), dormir, entre medias pastilla de la alergia y algo de constipado del aire acondicionado.

Lo mejor, el sueño profundo del viernes noche, tumbarte y caer redondo; lo peor, pensar que te vas a caer de la cama al darte media vuelta, bendita cama de casita. Despertarte a media noche pensando en que te llama algún niño.

Cuando ya te despiertas, lloras pensando en que el lunes hay que ir a trabajar y retomar la rutina.

¿Y el morenito albañil «to guapo» que nos llevamos de Sevilla? ni vuelta y vuelta como en la playa, ¡caminando por Sevillita! Pero si esto es gloria, esta temperarura es perita, esta es mi Granada. Por si quedaba duda, lo de perita es que en isla mágica escuchamos a unos adolescentes decir, «illo, no te vayas, si hase un día perita», nos ha encantado escuchar expresiones distintas, hemos aprendido muchas cosas nuevas…

El momentazo fue cuando entrando a la capital de Sevilla, les pusimos a los niños por micrófono del bus la canción de «Sevilla tiene un color especial», el conductor alucinaba, pero esto solo era el comienzo.

Hay cantidad de momentos que no se pueden describir por escrito: la receta del bizcocho del pueblo de Enrique, el sonambulismo de Miguel, el supuesto pelo en un plato puesto en un trozo de mantel: llévalo al cocinero y que te dé explicaciones (por supuesto no lo hizo, no era pelo), el juego del trivial de Sevilla donde nuestros niños conocían muchas respuestas, y los adolescentes de otro centro escuchaban y no sabían contestar nada, momento Titanic en el barco paseando por el Guadalquivir, y más y más, pero eso deben contarlo los niños, tendrá más gracia.

Además de ser maestros, fuimos papás, mamás, hermanos, guías… y hasta ya podemos poner una farmacia, fuimos  farmacéuticos, enfermeros y médicos, vaya tela con los medicamentos, una mochila exclusiva para las medicinas. Todos los días abríamos consulta.

Illo, el spa es importante, pero no previo al viaje, después. Si con las horas que hemos echado, creo que cumplimos en el cole hasta el día 22… te imaginas.

En conclusión, nos lo hemos pasado genial, vamos, perita, vuestros niños llevan un estupendo recuerdo del viaje y de la ciudad. Gracias por demostrar el interés y saber estar en otro entorno y con otros profes (los guías). Claro que ha habido pequeñas cosas y detalles a trabajar, pero nada fuera de lo normal.

En fin, a aprovechar el domingo, que mi arma ya va mejorando.

PD: Acordaos del spa.

PD2: ENHORABUENA al equipo de baloncesto por ese tercer puesto, sois geniales después del «tute» del viaje.

Firmado: los «pringaillos».

Los fragmentos de Alara

Hace poco descubrí que poseía la «Chispa», es decir, que soy un caminante de planos. Me llamo Ajani, soy un leonino y vivo en Naya. Yo y mi manada vivimos al lado del Acestro Divino, vamos que somos vecinos de un bicho enorme y titánico, al que todo el mundo respeta. La verdad, no sé por qué, pero el bicho ese inspira mucho respeto, además, todavía no se ha comido a nadie. A lo mejor porque nosotros también le inspiramos respeto.

Últimamente la jungla está muy ajetreada, la elfo Mayael y los suyos no paran.

Hace poco mi hermnao y líder de la manada Jazal partió en busca de Mayael, para preguntarle el por qué de tal ajetreo. Aunque en vez de regresar mi hermnao, Mayael nos hizo una visita. Al llegar, estuvo a punto de desmayarse, pues había venido corriendo, y ni siquiera iba a compañada de sus amigos los druidas.

Al presentarse ante mí (de momento estoy al mando), la noté muy alterada, y eso era mala señal, pues el elfo siempre muestra un semblante tranquilo.

– Traigo… malas noticias-, dijo entre jadeos- Ajani, tu hermnao ha desparecido, y el Ancestro ha caído en un profundo letargo.

Me quedé de piedra. Agarré mi hacha doble y reuní a algunos hombres y partí con Mayael hacia su campamento.

Al llegar, vimos que en el campamento no había nadie… Solo un demonio enorme, al que Mayael reconoció:

– Sedris, ¿qué haces aquí?- siseó.

– Robar tu maná- respondió, con voz gutural- ya sabes, Grixis está falto de energía.

Y en efecto estaba robando maná, pues los árboles de los alrededores se habían marchitado. Entonces corrí y corrí hacía la guarida del ancestro Divino. Cuando llegué, le grité y grité «despierta, despierta». la voz me salió del alma, por eso me escuchó y despertó con un poderoso rugido, se erigió y acudió al campamento, furioso.

En el campamento las cosas no iban bien, pues Mayael y Jazal (también estaban allí), yacían en el suelo, sin sentido. Y Sedris iba a acabar con Naya, hasta que llegó el Ancestro, y, gracias al factor sorpresa, le dió una buena tunda, a ver si así aprendía a no robar.

FIN

Javier

VIAJE A SEVILLA. 4ª parte

Estimadísimas familias, esperamos que estéis descansados estos diíllas, porque esto no hay dinero con qué pagarlo. No es que nos quejemos sí nosotros somos maestros por vocación pero nos preguntamos: ¿Quién habrá inventado los viajecitos? Menos mal que según Rajoy los recortes nos van a afectar.

Es broma, estamos superencantados de convivir con vuestros hijos en paz y armonía. Ahora mismo vuestros hijos están montando unas fiestecillas y haciendo unos divertidos jueguecillos mientras nosotros estamos aquí escribiendo esta entrada para que sepáis qué cosas hacemos por estos lugares.

Por cierto, estamos en el lugar más fresquito de toda Andalucía (escogido por ese motivo), hoy a la sombra el termómetro marcaba 42º C,  a las siete de la tarde.

Como queréis saber lo que hemos hecho hoy, os lo vamos a relatar:

– Frase del día : «¡Illo, hoy no hase calo ni na, hoy se está perita!» (¿A qué temperaturas están otros días?).

– Los que llevaban anunciado toda la semana que se iban a montar en el Jaguar cuando lo han visto se han echado para atrás.

– Para sofocar el calor nada mejor, que una y otra vez, remojarnos en las bajadas de las atracciones acuáticas.

– Nuestros niños han dado una lección a más de uno, en un restaurante multitudinario han sido los únicos que se han levantado a recoger su bandeja y dejar limpia su mesa. Nos han felicitado por ello.

– Por cierto hemos roto hasta las chanclas, hemos perdido gorras en los inmensos ríos, monederos y casi hasta la ropa.

– ¿Recordáis nuestro estribillo de la chirigota de carnaval? : «Tiposo, tiposa… La hemos adaptado para nuestra Sevilla:

De viaje, de viaje

me voy por la mañana,

con mi maleta y mi clase perfumada.

Visita, visita

vemos toda Sevilla

¡Ay cuanto ando! ¡Ay, ay que no llego!

De vuelta, de vuelta

camino del albergue,

¡Ay que mal huelo! ¡Ay, ay que mal huelo!

–  Por útlimo una adivinanza:

Quienes son….

los que toman enelgisil por la mañana,

ibuprofeno para el dolor de cabeza,

lizipaina para la garganta,

aftersun para las quemaduras,

radiosalid para las lumbares,

trombocid para las piernas,

parches para las ampollas,

tres cafés en el desayuno…

¡Qué quines son! ¿ Y todavía os lo preguntáis? 

Creemos que para el año que viene necesitamos una semana previa en un Spa. Vamo mi arma un detallito, si entre toos no tocáis a na..

Isabel Rosales, Jorge Torrente y Eva Oliva.