Se dice que siempre que se produzca energía se usa siempre la misma cantidad de energía para producirla. Es como si transformamos la energía en otra energía. Creo que esto me confundirá para siempre porque conozco formas de crear energía que parace que usamos menos para crearlos.
Hasta con la energía nuclear se usa su energía para crear otra fuente de energía: la masa.
Un gas no tóxico le dejó inconsciente por un momento, y en cuando se despertó, notó todas sus extremidades atadas a una silla de metal.
La X se iluminó en la pared, en una esquina (las paredes no eran muy altas, de 2 metros y medio). Jack se intentó liberar de todas las formas posibles, pero sus resultados fueron en vano. Al contador le quedaba 1:00h. (una hora), pero Jack no se fijó en el contador, porque seguía intentándolo. Después de un intento desesperado, las cuerdas que lo ataban, se aflojaron. Jack consiguió liberarse de las cuerdas, pero aún le quedaba un misterio por resolver: ¿qué hacer con la X? Estuvo pensando varios minutos, y al final se decidió por romperla. Cogió la silla de metal, y con furia la golpeó contra la X, en el primer intento la X no se rompía, ni en el segundo, pero en el tercero, con mucha furia acumulada golpeó la pared, donde se situaba la X. La pared se rompió y Jack pudo ver una caja fuerte, se acercó a esta y comprobó que tenía que poner una contraseña; se puso a buscar como loco la supuesta contraseña.
En contador señalaba 0:45, cuando Jack lo vio se puso más nervioso, y de un golpe involuntario, la pared cedió dejando ver una serie de números desordenados, Jack pensó que tenía que ordenar esos números en el orden correcto para abrir la caja fuerte. Cogió el papel donde se situaban los números, fue corriendo a la caja fuerte, la cogió y la posó en el suelo. Después intentó con numerosas combinaciones pero ninguna era correcta. Jack se desesperaba cada vez que probaba con una combinación, hasta que con una de ellas, la caja fuerte se abrió. Jack se puso muy contento, pero al contador le quedaba muy poco tiempo (0:30), dentro de la caja se podía ver una llave, de estatura media, muy antigua. Jack, la cogió y buscó la puerta, que supuestamente se tendría que abrir con la llave que había encontrado Jack. Avistó un pomo de una puerta y pensó que esa era la salida. Fue a ella e introdujo la llave, la giró y la puerta se abrió. Jack, pudo ver detrás de ella una gran ciudad en la que vivía él.
Fue corriendo y se adentró en la ciudad, buscó su casa y después de unos minutos la vio, abrió la puerta y se echó en la cama. Suspiró y se durmió.
Todos y todas nos hemos planteado alguna vez la idea de hacer algo, pero, por qué no lo hacemos. No lo hacemos por nuestra débil mente, nunca hacemos lo que nos da miedo.
Yo, nunca le dije a un profesor que no me gustaba su forma de enseñar.
Barreras que nuestro cerebro pone a objetivos por miedo a fracasar en el trayecto o en el intento. Esas barreras tienen que desaparecer, hay que neutralizarlas cuando podamos, lo más pronto posible. Ellas, intentan acabar con nosotros utilizando uno de nuestros puntos más vitales, el de nuestros sueños.
Imaginaos un planeta sin sueños ni objetivos, sin nada en lo que soñar, en lo que llegar a ser. Sería un mundo “horrible”, sería un mundo sin nada.
Agustín.
× Utilizamos cookies propias y de terceros para mostrar vídeos y diapositivas, obtener estadísticas y ofrecerle publicidad personalizada. Puede aceptar todas las cookies pulsando "Aceptar". También puede rechazar todas o algunas de ellas pulsando configurar cookies. Más información en nuestra política de cookies.
Configurar cookies
Utilizamos cookies propias y de terceros para mostrar vídeos y diapositivas, obtener estadísticas y ofrecerle publicidad personalizada.
Cookies técnicas
Son aquéllas que permiten la navegación a través de la página web y la utilización de las opciones y servicios que se ofrecen. Le permiten acceder a su cuenta, mantener su sesión, visualizar vídeos y recibir soporte. Alqueria.es utiliza cookies técnicas propias y de terceros. Estas cookies son necesarias para que el sitio web funcione y no se pueden desactivar.
Cookies de análisis
Son aquéllas que permiten el seguimiento y análisis del comportamiento de los visitantes del sitio web. La información recogida mediante este tipo de cookies se utiliza para la medición de la actividad del sitio web, así como la elaboración de estadísticas y perfiles con el fin de mejorar el sitio web. Alqueria.es utiliza cookies de análisis propias y de terceros.
Cookies de publicidad comportamental
Son aquéllas que permiten la gestión de publicidad de un sitio web. Estas cookies almacenan información del comportamiento de los usuarios obtenida a partir de sus hábitos de navegación, lo que permite desarrollar un perfil específico para mostrar publicidad en función del mismo. Alqueria.es utiliza cookies de publicidad comportamental propias y de terceros.